Sobre DINOSAR

Concepto y objetivo del proyecto

DINOSAR pretende desarrollar algoritmos basados en Copernicus para apoyar aplicaciones agrícolas inteligentes que puedan utilizarse en todo el mundo, con nubes o sin ellas. Esto ayudará a los agricultores a adecuar los insumos agrícolas (fertilizantes, pesticidas, agua) a las necesidades de los cultivos, reduciendo su huella medioambiental.

Nuestros objetivos

Supervisar la fenología y la salud de la caña de azúcar integrando datos provenientes de satélites ópticos, infrarrojos y radar de apertura sintética (SAR)

Poner en marcha el prototipo de estos algoritmos de forma que funcionen en tiempo casi real, pueda ampliarse geográficamente y puedan extenderse a otros cultivos.

Desarrollar casos de uso con socios internacionales apropiados para diversos clientes y segmentos de mercado. La ambición de DINOSAR es supervisar los cultivos de caña de azúcar en el Valle del Cauca (Colombia) y llegar así a posibles usuarios finales directos.

Establecer una metodología genérica para aplicar esta investigación a otros cultivos y zonas geográficas, incluida una hoja de ruta de desarrollo de productos para desarrollar la explotación del proyecto.

Las soluciones de Copernicus permitirán a los agricultores optimizar la gestión del riego, el     monitoreo de sequías      y el uso de fertilizantes, lo que a su vez reportará beneficios económicos y medioambientales. Se sabe que la agricultura inteligente puede reducir en un 20% el consumo de agua, fertilizantes y pesticidas, manteniendo al mismo tiempo la producción.

Situado en el Valle del Cauca, en la región sur de Colombia, nuestro caso de estudio se centrará en el cultivo de la caña de azúcar. Un vínculo privilegiado con el socio colombiano AgroAp facilitará los intercambios entre la parte académica del proyecto y los usuarios finales, situados principalmente en América del Sur.

Área de estudio del proyecto DINOSAR en Colombia

¿Por qué nos centramos en territorio colombiano?

El sector de la caña de azúcar en Colombia tiene ciertas características que lo convierten en un excelente caso de prueba para el desarrollo de DINOSAR:

  • La caña de azúcar está asociada a la degradación de la tierra y a la sobrefertilización.     Es también el mayor cultivo del mundo en volumen, y la constante demanda del mercado de sus derivados (azúcar, etanol, bioenergía) asegurará la permanencia de esta materia prima.
  • Se pueden obtener ganancias sustanciales en la eficiencia de los recursos. Colombia es uno de los países de la región con mayor sobreexplotación de fertilizantes: hasta el 70% del nitrógeno aplicado se desperdicia.
  • El uso sostenible del suelo es primordial para que el sector esté preparado para el futuro. Esto es tanto más importante cuanto que la superficie plantada en el Valle del Cauca ha alcanzado su potencial, y la expansión geográfica en el valle no es una opción.
  • La zona presenta una importante nubosidad durante todo el año, condición que se agrava durante los periodos de La Niña (fenómeno climático que produce fuertes depresiones nubosas). Esto la convierte en un campo de pruebas ideal para los algoritmos DINOSAR;
  • El consorcio DINOSAR cuenta con una extensa red de contactos en Colombia, lo que le permite tener un buen conocimiento del sector y contar con socios de confianza. Esto favorece el desarrollo del proyecto y permitirá realizar una extensa campaña de campo con socios locales.
  • La industria azucarera colombiana es sólida, ya que ha invertido en el desarrollo de otros productos derivados de la caña, además del azúcar, como la producción de etanol y la cogeneración de energía. La cogeneración es la generación de electricidad y energía térmica a partir de una única fuente de combustible, en este caso, el bagazo de caña (residuo seco tras la extracción del jugo de la caña). Esta diversificación reparte los riesgos de producción en 3 cadenas de valor. Esta sofisticada forma de producir y procesar la caña de azúcar sitúa a Colombia como un productor muy respetado en el sector.